La Compañía regaló a los miles de vecinos y turistas que se acercaron hasta el parque Miguel Lillo una puesta en escena espectacular, con diez acróbatas volando por los aires y un show digno de la celebración para la niñez más grande del país
El show comenzó cuando las luces iluminaron el cielo, el sonido atmosférico empezó a subir sus decibeles y, por encima del escenario principal, colgados de una estructura que flotaba entre los árboles asomaron los primeros acróbatas de la Compañía PhaWay, mostrando a las miles de personas reunidas en el Festivalódromo el primer acto de su show “Célebre”.

Acompañando el asombro del público, la banda sonora del espectáculo, compuesta por un trío que acopló a la perfección los sonidos de los teclados, la batería y el bandoneón, que le dio el toque tanguero a la velada, interpretando piezas hasta del mismísimo Astor Piazzolla, fue subiendo la intensidad de la música hasta lograr un clima de ilusión absoluta.
Esta especie de teatro aéreo, que surgió una y otra vez desde el fondo de la escena regalando diferentes efectos visuales, terminó sus coreografías en un escenario complementario ubicado en el corazón de la audiencia, que siguió cada intervención con aplausos de admiración y algo de perplejidad.

















