Este sábado 2 de noviembre, es de las 14 horas, se llevará adelante un encuentro por la lucha por la autonomía de Quequén.

La convocatoria la hace el movimiento social autonomista de Quequén y el lugar será de reunión serán calle 520 y Almirante Brown frente al monumento a la gesta de Malvinas.

Allá se compartirán experiencias y logros, analizarán los desafíos y los obstáculos para alcanzar la autonomía y reafirmarán el compromiso con la creación del nuevo municipio de Quequén.

Demian Ledesma,  secretario general de la Asociación Bancaria visitó los estudios de Radio Rivadavia Necochea para participar de la entrevista de Necochea Digital. 

Ledesma contó cuál es la situación del Banco Nación tras la decisión del gobierno nacional de cerrar la sucursal de Ramos Mejía en el conurbano bonaerense. 

Explicó que “se anunció el cierre para fin de año, esto se enmarca dentro de una política que tiene el gobierno nacional para con el Banco Nación, que viene encadenando amenazas de cierre de sucursales como forma de disciplinamiento a municipios, gobiernos provinciales que no comulgan con las ideas libertarias”. 

Luego explicó que “la sucursal de Ramos Mejía se encuentra dentro del distrito de La Matanza donde hace algunos días hay un conflicto de intereses entre el empresario fetiche del gobierno, Marcos Galperín dueño de Mercado Libre y el municipio por la interrupción de los trabajos en la planta logística que estaba instalando esta empresa dentro del mercado central”. 

Sobre esta situación, Ledesma aseguró que “lo mismo se intentó con los municipios que tenían un cobro de tasas diferenciadas para tratar de financiarse ante las dificultades de cobrar la coparticipación. La más notoria es la del combustible, pero también hay de comercio, a los grandes supermercados, donde el ministro de Economía anunció que si estos municipios perseveran en esta intención, les va a cerrar las sucursales del Banco Nación”.

Por último señaló que “cuando uno dice que este gobierno es destructivo la palabra suena fuerte pero no se le mueve la pestaña cuando dicen que vienen a destruir todo y honestamente se ha naturalizado y no parece tener el mismo rechazo en el común de la gente que puede tener para nosotros”.  

Concluyó afirmando que “encima tenemos un sistema político que está con una de sus más profundas crisis de los últimos 40 años de democracia”.

La Municipalidad de Necochea fiscaliza el avance por estos días de la construcción de dos estaciones más por parte de la empresa adjudicataria correspondientes al bello circuito del Vía Crucis Ribereño, que en total estará compuesto por 14 estaciones que unirán el Puente Taraborelli con el paraje “Las Cascadas”.

Al respecto, el subsecretario de Obras Públicas de la Municipalidad, Lisandro Dones, confirmó que “seguimos avanzando, es parte de la obra que se inició el año pasado y estamos completando dos estaciones más”, con el objetivo de llegar al armado final del circuito turístico religioso, cuyas 14 estaciones se enclavan en diferentes puntos de la margen necochense del Río Quequén.

Vale recordar que “esta obra había sido solicitada en el 2005 por la Asociación de Amigos del Paraje Las Cascadas y, después, la continuó el grupo Vía Crucis Ribereño desde 2018, auspiciado por el Obispado de Mar del Plata”, explicó Dones en referencia al expediente que dio origen a esta intervención.

Los puntos están divididos entre sí por una distancia de unos 700 metros y acerca del diseño de las estaciones nuevas que se van sumando, se recuerda que se realiza una plataforma base de hormigón armado asentada en un terreno firme sobre la cual se ubica una base de tres pantallas, del mismo material, las que llevarán en su centro un espacio hueco destinado al empotrado de la cruz, que también es de hormigón con un aplique de madera en su frente. En la base de la cruz se aplica en relieve la imagen religiosa que identifica a cada estación.

En la actualidad hay diez estaciones ejecutadas y de a poco se va llegando a la culminación integral del proyecto, cuyos objetivos van desde lo religioso a lo turístico, con la idea de seguir potenciando el sector ribereño, en este caso en una extensión de casi 10 kilómetros, originando espacios libres que permitan apreciar la belleza natural que ofrece el Río Quequén con sus variados saltos, curvas, altas barrancas y una nutrida fauna autóctona.