Con el propósito de aportar una mirada a las situaciones críticas que atraviesa el sistema de salud local se realizó en el Comité Emiliano Abásolo de nuestra ciudad una charla abierta a cargo del Dr. Juan Carlos Barrera,
El expositor fue director del Hospital Ferreyra y ex secretario de salud del municipio durante la gestión de Daniel Molina.
Esta como otras charlas se enmarcan dentro del programa “Haciendo Radicalismo Todo el año”
Barrera realizó un pormenorizado relato de la situación puntual que el servicio de cirugía (del cual forma parte) atraviesa con respecto a la falta de anestesiólogos.
Para él este es “un problema cada vez más apremiante, cuya solución, tal lo explicó, requiere de acciones conjuntas entre el Ejecutivo Municipal, la provincia de Buenos Aires y la Asociación Argentina de Anestesiólogos, puntualmente la filial Mar del Plata”.

Respecto a este tema remarcó: “falta la idea de pensar cómo cambiar determinadas situaciones, existe un aumento preocupante de las listas de espera para realizar cirugías programadas que podría generar complicaciones en los pacientes. Lograr llegar antes y evitar también los costos en tratamientos, cirugías o quimioterapias es un camino que no se ha transitado lo suficiente.” agregó.
Al momento de las preguntas, la concejal Felicitas Cabretón consultó por el camino institucional y los posibles instrumentos que desde el bloque de la UCR podían abordarse, por la posibilidad de trabajar en conjunto con otros municipios de la región sanitaria VIII, planteando también una posible declaración de emergencia sanitaria en la región.
Luego, a partir de la intervención de Gonzalo Diez con respecto a la optimización de recursos y la falta de planificación, se abordó el tema de los programas y estrategias.
Puntualmente, Barrera se refirió al programa de Detección Temprana del Cáncer de Colon, una estrategia diseñada para disminuir la tasa de intervenciones, optimizar los recursos y reducir las complicaciones en esta patología.
Este programa, según manifestó Barrera, no se ha puesto en funcionamiento, con el consiguiente perjuicio al sistema de salud en general, y a los pacientes en particular.

“El sistema tiene tanta demanda que no se le dedica el tiempo y los recursos a gestionar proyectos fuera de la coyuntura” concluyó Barrera.













