La implementación de la nueva tasa portuaria en Necochea y Quequén, que busca beneficiar a vecinos y vecinas mediante un porcentaje de las ganancias de las exportadoras, ha generado un intenso debate.
Según publicó el sitio Necochea Digital, dos dirigentes locales del sector agropecuario habrían lanzado advertencias en caso de que la tasa prospere. Uno de ellos, habría declarado: “Los vamos a escrachar en todos los medios nacionales, tenemos el poder económico para hacerlo”.
Sin duda una frase poco feliz y que muestra la intención de presionar o amedrentar a autoridades municipales y concejales con la posibilidad de financiar campañas mediáticas, como han ocurrido con otras ocasiones figuras políticas nacionales.
Las amenazas de algunos dirigentes del campo reflejan un clima de tensión política y mediática que nada ayuda al diálogo y la necesidad de encontrar soluciones a problemáticas que -desde siempre- padece un sector de la comunidad.
En el proyecto de la tasa portuaria se informó que tiene como fin mitigar los impactos que está actividad genera en las calles de Quequén, las cuales en varios sectores están destruidas por el tránsito pesado.
Por eso lo que se recaude serviría para reparar la infraestructura vial y mejorar la calidad de vida de los vecinos.













